Reutilización de mascarillas por esterilización por método de calor seco

El Ministerio Federal de Trabajo y Asuntos Sociales (BMAS) y el Ministerio Federal de Salud (BMG) de Alemania sugieren una esterilización con calor seco de las máscaras/mascarillas usadas, como solución. Señalan que el coronavirus (SARS-CoV-2) se desactiva cuando se expone a un calor seco de 65-70°C durante 30 minutos. Del mismo modo, una máscara/mascarilla se puede descontaminar, utilizando un procedimiento de calor similar, y se puede usar de forma segura hasta dos veces más. Este método de “purificación” por calor seco podría ser útil para abordar la escasez de mascarillas, particularmente para el personal médico que trata a pacientes infectados por COVID-19.

Es importante tener en cuenta que las mascarillas deben poder mantener su “tejido” a 65°C. De acuerdo con las pautas BMAS y BMG, una propiedad resistente al calor de la mascarilla de protección respiratoria debe verificarse a la temperatura de 65°C. Por ejemplo, las mascarillas EN 149, un estándar de certificación CE, requieren una prueba de propiedad resistente al calor bajo la condición de 70°C durante 24 horas. En consecuencia, el método de esterilización por calor seco propuesto se puede aplicar a las mascarillas EN 149. Pero la mayoría de mascarillas autorizadas para su distribución en los EE. UU., Canadá, Australia o Japón, han sido pretratadas solo a 38°C, por lo que requieren pruebas adicionales de una propiedad resistente al calor antes de la esterilización por calor seco. Observamos que las máscaras/mascarillas KF, populares en Corea, también se pretratan solo a 38°C.

En Corea, se usan ampliamente dos tipos diferentes de mascarillas: una para la salud personal y la otra para uso industrial. Son administrados por separado por la Administración de Medicamentos y Alimentos (KFDA) y el Ministerio de Empleo y Trabajo (MOEL). El estándar KF no requiere una prueba de la propiedad de resistencia al calor, por lo que es necesario realizar más pruebas para garantizar que su función de filtrado se mantenga después de la esterilización sugerida por calor seco. Sin embargo, debido a que KF94 aplica el mismo estándar con FFP2/3 de Europa y N95 de los EE. UU., y debido a que se basa en una tecnología de carga electrostática que utiliza material fundido por soplado como material básico, esas máscaras/mascarillas KF pueden esterilizarse con calor seco. En comparación, aunque las mascarillas industriales se prueban más estrictamente a 70 °C durante 24 horas, no son adecuados para fines de salud pública porque su válvula de respiración no tiene una función comprobada para prevenir la emisión de virus.

Un equipo de investigadores de 3M informó que la función de filtrado de sus mascarillas N95. No se ve afectada cuando se realizaban pruebas repetidas de 5 a 10 veces bajo la condición de 60°C y 80% HR durante 30 minutos. Del mismo modo, un equipo de investigación de la Universidad de Stanford descubrió que las mascarillas certificadas N95 podían mantener su función de filtrado después de realizar pruebas repetidamente 20 veces bajo la condición de 75°C durante 30 minutos.

Peter Tsai, profesor emérito de la Universidad de Tennessee en los Estados Unidos, quien inventó la mascarilla basada en la tecnología de carga electrostática (N95), afirmó que la eficiencia del filtrado no disminuiría incluso si una mascarilla es tratada varias veces por la esterilización por calor seco. A 70°C durante 30 minutos. Advirtió que el tejido del filtro no debe tener contacto directamente con la superficie metálica de alta conductividad térmica durante la esterilización, y los usuarios deben lavarse las manos con jabón después de manipular las máscaras/mascarillas no esterilizadas.

Tanto el (BMAS) como el (BMG) de Alemania afirman que un horno de uso común en hospitales o laboratorios puede usarse adecuadamente para el procedimiento de esterilización por calor seco. Los hornos de cocción de uso general no se recomiendan para este procedimiento, ya que su precisión de control de temperatura entre 65 y 70°C aún no está asegurada, y presentan una preocupación adicional sobre la infección a través de los alimentos. Además, dado que este procedimiento de esterilización no se ha probado contra todos los patógenos generales, la recomendación actual solo se aplica al uso reciclado por parte del personal que opera en el entorno COVID-19. Las mascarillas utilizadas por pacientes con tuberculosis u otras enfermedades infecciosas fuertes deben descartarse.

El mundo entero ha estado sufriendo sin precedentes por el COVID-19. Esperamos que este breve informe sobre el procedimiento de esterilización por calor seco pueda hacer una contribución pequeña pero efectiva para abordar el problema de escasez de máscaras/mascarillas que enfrentan el personal médico y los equipos de salud pública de todo el mundo.

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